Estos últimosdías se ha vuelto a producir una nueva oleada de robos esta vez en el término de Valdeargorfa, en Teruel. Los cacos han desvalijado varios locales, incluído el colegio, que ya sufriera una oleada similar hace unos meses. Recientemente, el Ministerio del Interior puso en marcha una nueva unidad de la guardia civil destinada a evitar los robos en el ámbito rural. Es desde luego, un primer paso, pero mucho nos tenemos no será suficiente.
No se trata sólamente de un problema de vigilancia, que también lo es , sino de legislación. Mientras las leyes no cambien y se endurezcan de una manera radical, los robos continuarán. Prácticamente la mayoría de estos delitos se saldan con condenas muy leves, apenas se castiga la reincidencia y es precisamente, la levedad de nuestro Código Penal el que propicia que mafias de otros países pululen a sus anchas por territorio nacional gracias a las bondades del espacio "Schengen" que no pudo, no quiso prever lo que pasaría con una apertura total de fronteras interiores en Europa que ha supuesto poner en bandeja la presencia de estos grupos en España